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ENSEÑANZA DEL FÚTBOL EN EDUCACIÓN INFANTIL

Como todos sabemos, el aprendizaje de un deporte como el fútbol no se empieza a dar hasta los 4-5 años en las escuelas de fútbol. Pues bien, en esta página se van a mostrar algunos ejercicios que pueden llevarse a cabo en las escuelas infantiles desde cualquier edad teniendo como objetivo su iniciación en este deporte y que, estos ejercicios afectan positivamente al desarrollo integral del niño. 
PRIMER CICLO (0-3 AÑOS)

Según el entrenador deportivo Rafa Benítez, tiene en cuenta la evolución del niño a lo largo de sus primeros años de vida como algo que tiene una grandísima importancia. Durante los primeros años (0 a 3 años) considera que el movimiento en los niños es tan importante como desarrollar las capacidades de observación, creatividad, coordinación, equilibrio y una manera de percibir su sentido del espacio y del tiempo (Benítez Maudes & Córdoba Astillero, 1982).

A los 16 meses de edad del niño, sería conveniente utilizar una pelota de playa porque es más blanda, y por esta razón, son capaces de patear la pelota con más facilidad. Los ejercicios que se podrían llevar a cabo, son los dos siguientes:

  • Rodar la pelota hacia el niño de manera que él mismo pueda devolvértela pateándola. Este ejercicio trata de trabajar la observación y la coordinación porque los niños tendrán que observar detalladamente la pelota para identificar a qué lado se va a dirigir la pelota (observación) y realizar el “chute” o el golpeo al balón en el momento adecuado (coordinación) (Lack, 2014). Aunque todavía no tienen el concepto de tiempo establecido, comienza a trabajarse el sentido del tiempo inconscientemente porque cuando el adulto le lanza la pelota, el niño tiene que pensar en cuándo le va a llegar el balón a sus pies, pero lo hace de manera inconsciente porque no tiene interiorizado el concepto de tiempo ya que éste lo interiorizará más adelante.

  • El adulto le lanza la pelota para que el niño esté atento y la recoja con las manos, es decir, como si estuviera actuando como un guardameta de verdad. Al igual que en el ejercicio anterior, se trabaja también el sentido del tiempo de la misma manera porque básicamente es la misma acción aunque esta vez con las manos. Además trabaja también la coordinación porque la coordinación implica tener un control sobre tu cuerpo y para realizar el ejercicio se necesita de ese control para que el niño dirija sus brazos hacia el lado por el que va a pasar el balón.

Es muy importante que se comience a situar al niño en el mundo del fútbol. Esto, podríamos llevarlo a cabo mediante la exposición repetida de palabras o frases como: “¡Gol!” o “¡Buena parada!”; o si juegan un grupo de niños (ya sean dos o más de dos) podríamos añadir: “¡esa es buena, equipo!” “¡Así se juega!” o frases de ese estilo que alaben el juego en grupo (Lack, 2014).

Normalmente, a los dos años ya caminan e incluso hasta son capaces de correr. Por este motivo, podríamos enseñarles unas primeras técnicas de control del balón. Estas primeras técnicas de control se realizarían con el ejercicio de patear el balón mientras el niño está andando. En un principio y cuando son más pequeños, como se ha mencionado anteriormente, el ejercicio de patear el balón se realizaría sentado puesto que muchos niños a los 16 meses no han aprendido todavía a andar o andan con algo de dificultad.  

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